La parcela de que dispone el Ayuntamiento para la construcción de la dotación objeto del presente Proyecto está enclavada en una pequeña manzana de forma sensiblemente trapezoidal, ocupando la edificación una zona rectangular situada en la parte norte de la misma y dejando un espacio libre que completa el resto de manzana en la parte sur. Este espacio libre se pretende recuperar como una plazaen la que se integra el edificio. La plaza queda rodeada por viales con tráfico rodado en sus cuatro lados.
Su superficie, tal y como se expone anteriormente, es de 780,58 m2 y su topografía es sensiblemente llana y horizontal. El programa de necesidades requerido por el Ayuntamiento incluye un mercado público, de dimensiones similares a las del edificio antes existente, un bar o cafetería (existente en prácticamente todos los mercados) una oficina de consumo, compuesta de dos despachos y una sala de reuniones, y una sala de lectura de dimensiones adecuadas al número de posibles usuarios. Además, el funcionamiento del edificio deberá posibilitar que los distintos usos puedan desarrollarse sin interferencia de horarios entre ellos. Además, el funcionamiento del edificio deberá posibilitar que los distintos usos puedan desarrollarse sin interferencia de horarios entre ellos.
Se proyecta pues el edificio con los condicionantes de partida que suponen el programa de necesidades, la forma del solar y su situación concreta en la trama
urbana.
Tradicionalmente los mercados se han venido desarrollando en espacios al aire libre, y aunque su ubicación era relativamente estable, no contaban con el soporte de una edificación. Por otra parte, la parcela sobre la que se desarrolla el proyecto está situada frente a la zona verde que se sitúa al sur de la misma, de importantes dimensiones en relación con el núcleo del Grao, por lo que se plantea la opción inmediata de “abrir”, en la medida de lo posible, el ámbito del mercado al espacio exterior, conectándolo visualmente con la zona verde confrontada.
La decisión de permeabilizar hacia el sur el edificio es la que orienta todo el proyecto. El edificio se desarrolla en dos plantas, y se disponen las piezas de forma que cada una de ellas pueda funcionar con absoluta independencia de las restantes. Así, el acceso principal en planta baja, pasante, separa el mercado de la cafetería y del acceso a la planta superior.
Para la organización de las plantas se ha optado por un esquema de bloque lineal, con un paso longitudinal desplazado del eje central, orientando los espacios de servicio y el núcleo de comunicación vertical al norte y el resto de dependencias, mercado, bar-cafetería, oficinas y sala de lectura, al sur.